lunes, 7 de marzo de 2011

EDUCACION POR DECRETO.

¿Se puede crear una Universidad por decreto? ¿Veracruz necesita otra universidad? Con los desfalcos económicos y la precariedad de las finanzas públicas, ¿quién, cómo y cuánto sería el monto del financiamiento de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz?
Estas son algunas de la preguntas que nos hacemos quienes seguimos de cerca los fenómenos educativos en el país y en el estado, y es que basta ver los criterios de calidad y los programas de desarrollo institucional de las Universidades públicas y privadas, con trayectorias históricas, como la propia Universidad Veracruzana, para saber que abrirse un espacio y sobre todo sostenerse en medio del sistema público de educación superior no es nada fácil.
La Universidad Veracruzana ha clamado por que se incrementen sus recursos, que actualmente son de alrededor 3, 200 millones de pesos, y es sabedora de las múltiples carencias que aún hay que atender, y sin embargo, por “angas” o por “mangas”, sus presupuestos siempre son insuficientes. La negociación con la federación siempre es dura, aunque en los mejores términos, y siempre hay criterios que atender en la normativa para acceder a más y mejores recursos financieros.
Es claro que promover educación es central en el marco coyuntural por que pasa nuestro país, sin embargo, no se trata de hacer decretos a diestra y siniestra. Puesto que solo muestra un reflejo a bote pronto para acallar los reclamos de miles de ciudadanos que se quedan sin oportunidad de estudiar el ciclo superior en Veracruz. Y más que nada las ansias de legitimidad de las autoridades constituidas.
En el fondo del decreto que crea la Universidad Popular Autónoma Veracruzana (UPAV), ronda el fantasma de la infraestructura, la planta docente, los recursos financieros operativos, los programas de desarrollo institucional, la oferta académica, las sedes regionales, las orientaciones y objetivos básicos, los modelos pedagógicos etc. etc.
Los promotores oficiosos aseguran que será la infraestructura académica e institucional del Instituto Veracruzano de Educación (IVE), lo que dará cuerpo a la UPAV. Lo único que hace falta comentar que el IVE carece de todo, hasta de instalaciones propias.
La desorientación es total, Guillermo Zúñiga Martínez, Director del IVE, asegura que la UPAV nacerá con recursos propios, ¿Cuáles? ¿Cuánto? ¿de donde se van obtener, o quién los va a dar?, Según el director del IVE, la nueva Universidad se financiará de ¡las cuotas de sus alumnos¡ y no solo asegura esto, sino que además se ufana que el decreto del Gobierno estatal será modelo a seguir en otros estados.
La lógica no es hacer mejores a las universidades que tenemos, sino “crear” por “decreto”, más, muchas más….”El proyecto de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, será pionero a nivel nacional por lo que pronto será replicado en otras partes debido a su éxito con tan pocos recursos, hecho que causa temor entre quienes la critican… Lamentó que quienes aseguran que esta universidad le quitaría recursos o parte de su presupuesto a la Universidad Veracruzana no tienen conocimiento de lo que hablan, pues la UPAV nacería con recursos propios, además que la mayor parte de su financiamiento es a través de las cuotas que pagan los alumnos. “La Universidad Popular Autónoma de Veracruz no le quitará presupuesto a la Universidad Veracruzana, quien diga lo contrario no sabe lo que está diciendo”.
La educación masiva (en todos sus niveles) llegó a su límite y capacidad. El modelo educativo en nuestro país muestra fallas y enormes contradicciones. Se requieren mecanismos democráticos, transparentes, equitativos para la incorporación de alumnos a los sistemas de educación superior, métodos de selección, regionalización, etc. Pero no más Universidades. A menos que se tenga en mente que la actual Universidad Veracruzana es ineficiente, o algo mucho peor, que ni siquiera se tenga nada en mente.
Si se quiere pensar en innovar o ser pionero deberían pensarse en una educación universitaria desescolarizada, asumiendo todos los riesgos que esto implica, (el Proyecto Clavijero, dejó mucho que desear), riesgos pedagógicos, culturales, sociales, etc.
Recientemente, elaborado el decreto de la creación de la Universidad Popular, lo único que ha generado es una restructuración del presupuesto, originalmente acordado para el 2011. Y los cerebros financieros del gobierno estatal se disponer a recortar presupuesto a otras secretarias, como la de medio ambiente, por ejemplo.
La diputada integrante de la Comisión de Hacienda, Karime Aguilera Guzmán, precisó que en esta misma semana que estamos iniciando, se celebrarán reuniones con el área técnica de la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN) para definir las reasignaciones presupuestarias al integrarse a la estructura del Poder Ejecutivo, las nuevas dependencias mencionadas, destacando que la nueva UPAV contaría inicialmente con 20 millones cien mil pesos para sus actividades de educación superior, como una opción para la juventud estudiosa que no logre ingresar a la Universidad Veracruzana (UV)…Anticipó que se podrían restar recursos económicos a la Secretaría de Desarrollo Social y Medio Ambiente (SEDESMA) donde actualmente ya funciona una subsecretaría que se ocupa de temas ecológicos, pues la idea es disminuir el gasto corriente destinado a las diversas áreas, para ajustarlo al techo financiero por 77 mil 950 millones de pesos ya establecido para el año actual en el presupuesto del Estado, con prioridad al gasto de capital.

Con 20 millones de pesos, la nueva Universidad Popular intentará dar viabilidad a las 30 licenciaturas actuales,  19 maestrías y los 3 doctorados que actualmente tiene el IVE, y según parece hasta con  las 498 preparatorias que dicen tener.
No, la educación de un estado o de un país se resuelve por decreto. Cabria preguntar ¿a quien se le ocurrió dicho proyecto?
No estamos contra la educación, ni siquiera con ampliar las oportunidades educativas, pero deja mucho que desear la “idea” de que ampliar oportunidades esta directamente relacionada con la apertura de más escuelas.
 
Edgar González Suárez.

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